ULLER PARTICIPA EN SOS ARTIC 2022: UNA EXPEDICIÓN POLAR SIN PRECEDENTES CON EL TRINEO DE VIENTO DE RAMÓN LARRAMENDI
Hay quien dice que las cosas realmente especiales comienzan por ser algo bastante más sencillo de lo que podemos llegar a imaginar. Nosotros hoy, desde Uller, lo confirmamos. Ocurre como cuando dos personas se conocen en un bar y resultan ser el amor de la vida del otro. ¿Te suena? Seguramente sería un bar cualquiera de un día aleatorio en el que ninguno de los dos tenía pensado enamorarse. Y sin embargo, ahí están. Pero no, nuestra colaboración con el equipo de Ramón Larramendi no empezó en un bar, sino en un correo electrónico. Y tampoco culminó con un beso, sino con una expedición a Groenlandia – exitosa, por cierto, y de la que hablaremos detenidamente en este artículo –, y aquí haremos un breve recorrido por nuestra pasión por el Ártico y la muestra de nuestro apoyo a la investigación para hacer de este planeta algo, no solo mejor, sino también menos desconocido.
UNA COLABORACIÓN DE LO MÁS ESPECIAL CON EL EQUIPO DE RAMÓN LARRAMENDI
Fue la polarista Begoña Hernández Vidal (1980) la que nos contactó este mismo abril de 2022 para contarnos lo que ella y su equipo tenían en mente. Begoña, como licenciada en Ciencias Ambientales, embajadora de los entornos polares y auténtica apasionada, estaba a punto de llevar a cabo su próximo desafío: una expedición polar sin precedentes de la mano del Trineo de Viento de Ramón Larramendi. Así que claro, le pedimos que nos contara más. ¡Estábamos demasiado emocionados!
Sería el mes siguiente, en mayo, cuando empezaría la aventura. Una aventura a la que invitaban a Uller a subirse a bordo del trineo de Larramendi. ¡Menudo honor! Él y todo el equipo – del que luego te vamos a contar todo – confiaría la protección de su vista a nuestras máscaras y gafas de performance. Evidentemente dijimos que sí. Y dijimos que sí por dos razones principales. En primer lugar, porque colaborar con personas que nos inspiran es una de las partes de nuestro trabajo que más nos gustan. ¡De algo así solo pueden salir cosas buenas! Y, en segundo lugar, porque somos unos apasionados de Larramendi y la labor que hace, y creemos que es de vital importancia apoyar la investigación nacional especialmente en todo lo que tiene que ver con frenar el cambio climático. Descubrir las partes más recónditas de nuestro planeta y ver en primera persona las consecuencias del deterioro de los ecosistemas es el primer paso para ponerle solución. Groenlandia es, al fin y al cabo, un lugar del planeta en gran parte desconocido, y hacer una expedición en el Trineo de Viento es todo un hito. Uller tenía que estar.
¡Y vaya si estuvo!
¿QUIÉN ES RAMÓN LARRAMENDI?
¿Por dónde empezar? Es decir, ¿quién no conoce a Ramón Larramendi? Si no sabes de quién hablamos, no te preocupes. Nunca es tarde para descubrir a personas extraordinarias. Te vamos a poner en contexto.
Ramón Hernando de Larramendi (1965) es el más reconocido explorador y aventurero español de los últimos tiempos. Con más de 40.000km de territorios polares recorridos a sus espaldas, se podría decir que la pasión que tiene por lo que hace va más allá de cualquier vocación. En un reportaje para BBVA dentro de la campaña “Aprendemos juntos” asegura que todo empezó como un juego. Cuenta que sus primeras expediciones con esquís las hizo con sus amigos en los Pirineos, los que llegó a cruzar de este a oeste; y en Islandia. Tiempo después y siendo aun muy joven, participó en un sorteo de Antena 3 en colaboración con la empresa Nescafé en el que les contabas el sueño que tenías y te podía tocar que se cumpliera. El suyo fue viajar a Groenlandia, y su sueño – llámalo destino, suerte o pura coincidencia – se cumplió. Él y su grupo de amigos, que no pasaban de los veinte años, fueron allí y descubrieron un paisaje que a todos les robaría el corazón, pero que a Larramendi le llevaría a convertirse en quien es a día de hoy.
Un auténtico crack.
De su “palmarés de explorador” sabemos que Larramendi ha recibido numerosos premios en reconocimiento de su trayectoria, y si habláramos de su currículum podríamos decir que en 1997 fundó la agencia de viajes Tierras Polares, que en 2007 asumió la Dirección de la Fundación Polar Internacional de España, que forma parte de la Junta Directiva de la Sociedad Geográfica Española y que establecer su segunda residencia en la mismísima Groenlandia le ha hecho hablar de forma fluida el idioma de los Inuits. Por si fuera poco, también tiene en marcha el proyecto Inuit Climate Patrol que busca promover las tradiciones esquimales (propias de la cultura Inuit) en la región groenlandesa de Thule para que no se pierda.
Es, en definitiva, el español que mejor conoce el Ártico y que más ha recorrido el continente Antártico.
Ahora bien, si algo le ha hecho verdaderamente conocido dentro y fuera de nuestras fronteras, es por la creación del Trineo de Viento: el primer vehículo polar movido por energías renovables que existe en el mundo.
EL TRINEO DE VIENTO DE RAMÓN LARRAMENDI: EL FUTURO DE LA INVESTIGACIÓN
Es cierto que, hablar de Larramendi como un explorador es quedarse algo cortos: es el creador del primer vehículo polar movido por energías renovables. Exacto, el que todo el mundo conoce como Trineo de Viento, ye te vamos a contar todo sobre él porque es el protagonista de esta expedición en la que Uller ha participado.
Lo que en un principio era un proyecto diseñado para la exploración geográfica en las regiones polares, ha pasado a ser un vehículo al que califica el propio Larramendi de “eficiente, económico y sostenible para la compleja y costosa recogida de datos científicos en estos territorios”. Se ha convertido en el auténtico eje de sus expediciones a Groenlandia como esta última en la que han querido contar con nosotros, y que ahora tiene el reconocimiento científico e institucional a nivel internacional. En él se pueden almacenar muestras recogidas de los lugares más escondidos del planeta y hacer al mismo tiempo de laboratorio para analizarlas. Y es que, tal y como te contamos, este vehículo ha sido el único que ha llegado el punto de más difícil acceso del continente antártico.
Aquí te dejamos un vídeo en el que podrás ver exactamente en qué consiste este vehículo y las extraordinarias condiciones atmosféricas que ha sido capaz de soportar.
UNA EXPEDICIÓN POLAR SIN PRECEDENTES EN GROENLANDIA CON EL TRINEO DE VIENTO
El primer diseño del Trineo de Viento se hizo en 1999, y desde entonces ha pasado por un gran número de cambios y mejoras teniendo en cuenta las dificultades climatológicas a las que se tiene que enfrentar en las expediciones y otros factores importantes para tratar de hacerle más resistente y rápido. Por eso, en esta expedición polar sin precedentes en la que Begoña Hernández se unía a Larramendi y a su equipo, el Trineo de Viento estaba puesta a punto para hacer lo que mejor sabe hacer: “surcar el hielo” como lo haría un barco en pleno océano.
La Expedición SOS Artic 2022 llevaba a bordo al alpinista Borriol Carlos Pitarch – con algunos 'ochomiles' a sus espaldas como el Cho-Oyu o el Everest –, el también alpinista Marcus Tobía, las investigadoras Lucía Hortal y Begoña Hernández – maestra de ceremonias de esta colaboración con nosotros – y el montañero y periodista Juan Manuel Sotillos. ¿Su objetivo? Principalmente investigar los efectos del deshielo y estudiar las consecuencias directas del cambio climático. Así, en esta expedición pasó algo con lo que el equipo no contaba y de lo que por supuesto se hizo eco en medios y en diferentes reportajes televisivos. Al volver a España, Begoña nos informaba así del suceso: “El equipo del trineo de viento estamos ya de vuelta. Ha sido una experiencia increíble de la que aun estamos despertando… ¡y hemos salido hace nada en las noticias porque durante la expedición descubrimos un nunatak que no estaba cartografiado!”. En el equipo nos quedamos alucinados. ¡Un nunatak! Se trata de una montaña que emerge del hielo como consecuencia del deshielo, y claro que eso nos da qué pensar. Al fin y al cabo, este desafortunado descubrimiento, aunque sorprendente, es el reflejo de las desastrosas consecuencias del cambio climático en el Ártico y algo que impacta mucho ver. Este accidente geográfico alcanzaba los 30 metros de altitud sobre el hielo y unos 2.000 metros sobre el nivel del mar. “Fue una gran sorpresa porque esperábamos una planicie y allí estaba ese pico rocoso”, contaba Ramón Larramendi. Sin embargo, lejos de ser catastrofistas, esta formación rocosa descubierta a 25 kilómetros del límite terrestre de la isla nos hace ver que la labor de personas como las que han conformado este equipo de exploradores es vital para ser más conscientes de que la Tierra es el bien más preciado y debemos cuidarlo como tal.
CON LA VISTA PUESTA EN EL FUTURO
El proyecto Trineo de Viento es ya una realidad, pero sin duda busca ser el futuro a nivel mundial de las investigaciones y exploraciones polares. Esta expedición sin precedentes en la que Uller ha tenido la enorme suerte de participar equipando a todos los integrantes con la mejor protección, se convertirá pronto en un documental que asegura dejarnos impresionados.
Como equipo, podríamos sacar un gran número de conclusiones positivas: que la unión hace la fuerza, por ejemplo. Sin embargo, como personas también. Y es que nunca sabes en lo que se puede convertir un sueño que tenías de pequeño. Nunca sabes lo que te puede deparar la vida y, sin embargo, seguimos fieles el camino que vamos haciendo – a veces sin saber muy bien cómo – y llegamos a convertir esos sueños que teníamos de niños, en realidad. Y ojalá nunca se nos olvide que somos capaces.
