DESCUBRE TODO EL DEPORTE QUE HACES ESQUIANDO
Al igual que cuando practicas cualquier otro tipo de deporte, nos podemos imaginar todos los beneficios que tiene el esquiar, pero ¿hasta qué punto? El esquí es un deporte que, no solo puede llegar a quemar alrededor de 700 kcal por hora, sino que mejora también tu sistema inmune, sin mencionar, claro está, lo mucho que puede llegar a tonificar tus músculos y lo bien que te lo pasas sobre los esquís.
Al ser un deporte aeróbico que involucra todo tu cuerpo, como efectos secundarios favorecerá, no solo a la quema de calorías, sino también a reducir los niveles de colesterol y a mejorar tu salud pulmonar, es decir, nuestra respiración. Esto se debe a que mientras esquías, en tu cuerpo se acelera la realización de procesos metabólicos, los cuales aumentan el aporte de nutrientes y oxigeno que llevan a las células.
Y es que ¿a quién no le gusta verse un poco más fuerte? A continuación, te vamos a contar cuáles son todos los músculos involucrados, cómo favorecer el aumento de su volumen y, en consecuencia, mejorar nuestra técnica en la pista.
No olvidemos que estamos sosteniéndonos en movimientos sobre tablas, lo que implica un buen equilibrio.
El único “problema” que nos da este deporte tan completo es la cantidad de agujetas que tendremos al día siguiente si no lo practicamos asiduamente, por esto es importante calentar antes. Los expertos recomiendan que, para evitar sufrir estos dolores musculares, se haga una introducción progresiva; no pasar de no movernos del sofá a tirarnos 6 horas esquiando. Además, es muy importante realizar un calentamiento previo al igual que cuando vas al gimnasio, puesto que así podremos prevenir cualquier tipo de lesión.
RUTINA DE CALENTAMIENTO PARA PRACTICAR ESQUÍ
¿Necesitas una rutina de calentamiento? Aquí te dejamos algunos ejercicios:
Para el tren inferior:
- Sentadillas: en ángulo recto y apretando el abdomen y sin que sobresalgan las rodillas de la altura de los pies.
- Salto a cajón: también nos vale un banco, lo principal es que esté a la altura de las rodillas. En este ejercicio podemos saltar con ambos pies, primero con uno y luego con otro, o simplemente subir y bajar una pierna; lo importante es la flexión.
- Zancadas: espalda recta, mirada al frente y subimos y bajamos en paralelos al suelo.
- Gemelos: subidos en un escalón nos ponemos de puntillas con un pie mientras el otro queda colgando.
Para el core y la espalda:
- Plancha frontal: boca abajo apoyados en los antebrazos y los pies con la espalda recta (además, con este también ejercitamos los tobillos).
- Abdominales que impliquen movimiento: aquí os dejamos libre elección, pero con el tip de que cuanto más lento sea el movimiento, más ejercicio estaremos realizando.
- Superman: tumbados boca abajo totalmente estirados levantamos piernas y brazos a la vez.
No pasar de 0 a 100 es muy importante para evitar cualquier posible lesión, siendo hasta el 60% las generadas en la rodilla por este motivo. Esta puede venir ocasionadas por daños en los tendones o por caídas y contusiones, puede que la nieve a veces no esté tan blanda cómo nos pensamos de primeras y un mal golpe nos deje sin disfrutar buena parte de la temporada. Otra de las lesiones más comunes por caídas es la luxación anterior de hombro y las lumbalgias por la postura corporal para mantener el equilibrio que tanta tensión genera en nuestra espalda.
¿CUÁLES SON LOS MÚSCULOS QUE SE TRABAJAN EN LA PRÁCTICA DE ESQUÍ?
Como has visto, las partes del cuerpo involucradas son muchas, y es que cuando te decíamos que el esquí es uno de los deportes más completos, no mentíamos. El core es uno de los grupos musculares más involucrados, concretamente dos de ellos: el abdominal y el lumbar. Ambos nos ayudan a estabilizarnos, proteger la columna y a coger más velocidad conforme inclinamos esta parte del cuerpo. A esta función también se unen glúteos, cuádriceps e isquiorusales, los cuales, si previamente tenemos entrenados, mostrarán resultados mucho más favorables. ¿Y sobre qué nos sostenemos? Sobre nuestros pies y gemelos, los cuales sostienen todo nuestro peso y realizan gran parte del movimiento sobre los esquís. Tenerlos bien entrenados nos hará ser más agiles y reducir nuestra radio de giro en la práctica. Y, hablando de giros, no podemos obviar a las grandes encargadas de ellos: las rodillas. ¿Imaginas esquiar sin usarlas? Exacto, nosotros tampoco.
De acuerdo, ya tenemos la postura correcta y a los encargados de realizar movimientos, pero ¿Qué pasa con el tren superior? Los hombros y los brazos también se emplean a la hora de practicar este deporte, estos portan los bastones con los que impulsarnos y son necesarios a la hora de realizar giros.
Y por último, no podemos olvidarnos de la espalda, envuelta en multitud de posiciones y movimientos, conectando hombros, core y piernas, encargada de mantener la postura, el equilibrio, protegernos, etc. De hecho, esta es una de las que más lesiones sufre por la tensión que mantiene, por lo que es muy conveniente estirarla tanto antes como después de esquiar, junto con el cuello. Para esto podemos hacer el ejercicio de rodillas al pecho: tumbados boca arriba recogemos las piernas flexionadas haciéndonos una bola.
EL ESQUÍ: UN DEPORTE DE ADRENALINA
Además de todos estos beneficios a nivel muscular, el esquí es un deporte muy liberador ya que nos hace desprendernos de toda la adrenalina que llevamos acumulada, favoreciendo en el descanso y la liberación de estrés, lo que colabora con un buen descanso reparador que nos preparará para otra jornada de esquí. Y es que el descanso es primordial, ya que otra parte a nivel no muscular que se entrena son los reflejos. ¿Qué completo no? Pues sí, más allá del físico también involucramos el entrenamiento de la mente, puesto que no podemos saber con anterioridad cuándo nos encontraremos con algún obstáculo en la nieve. Por esto nos conviene entrenar nuestra capacidad de improvisación y la agilidad que ello conlleva.
ENTRENAMIENTOS SIN NIEVE PARA MEJORAR LA TÉCNICA DEL ESQUÍ
Ahora es cuando piensas “vale, ya se todo esto, pero ¿cómo puedo entrenar para mejorar en mi técnica esquiando?” Al igual que tú, sabemos que esto, como cualquier deporte, es una carrera de fondo. No vale con entrenar un mes y descansar los otros 11 del año. A continuación, te dejamos un video publicado por la Federación Olímpica sobre cómo practicar los saltos de esquí en tu casa de la mano de Taylor Fletcher:
Porque sí, los grandes campeones también practican cuando no hay nieve, y en este video te mostramos cómo (aunque para este vas a necesitar mucho más que una silla):
PREGUNTAS Y RESPUESTAS
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¿CUÁNTAS CALORÍAS SE QUEMAN ESQUIANDO?
Esta pregunta es compleja, ya que depende del peso de la persona, su musculatura, ser hombre o mujer y la velocidad en los movimientos. Para tener una idea general, un hombre de 70kg quemará en torno a 600-700 kcal por hora.
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¿QUÉ EJERCICIOS HACER PARA ESQUIAR?
Para la preparación física del esquí, nos servirán todo tipo de ejercicios que involucren glúteos, piernas y core son fundamentales, al igual que entrenar de dos a tres días por semana. Algunos ejemplos de estos son las zancadas, las sentadillas, el peso muerto, ejercicios con gomas, todo tipo de planchas, etc.
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¿QUÉ MUSCULATURA SE TRABAJA EN EL ESQUÍ?
El esquí involucra muchos músculos en sus movimientos: el core, la espalda, todo el tren inferior y los hombros.